viernes, 17 de diciembre de 2010

UNA RISA MENOS, UNA ROSA MÁS


Ahora le toca el turno a Blake Edwards
y yo me quedo sin Guateque
ni Vino ni Panteras Rosas.
Desayunamos Diamantes sobre losas
de cadáveres exquisitos y "al dente".
Tan sólo (tan solo) pido una pequeña tregua,
mi calendario no puede con más muertes.

sábado, 11 de diciembre de 2010

UNA PÚA Y UNOS ACORDES


Estaba a un mes de cumplir ocho años cuando escuché un disparo, dos… cuatro disparos que provenían de la calle. Era lunes (como ya sabéis, el segundo peor día de la semana) y yo estaba haciendo unos deberes que no lograba descifrar, o estaba poniéndome el pijama de bolsillos, a punto de cenar. Oí gritos (los primeros gritos de verdadero horror que recuerdo) de gente apelotonada debajo de mi balcón y poco después las sirenas de la policía y de la ambulancia segando la oscuridad en un crescendo desde la otra orilla de la isla hasta mi taza de colacao.
La víctima era un vecino, John Lennon, que casi un año antes me había regalado una púa de guitarra y unos acordes, aquel miembro de un grupo que yo llevaba escuchando tanto tiempo.
Han pasado treinta años, los 8 de Diciembre había clase y la Constitución con dientes de leche se celebraba en las aulas, y yo sólo recuerdo los cuatro tiros en la noche que mataron a un cantante.